Un ático con historia, lo que en su día fueron las ‘cuadernas’ de un barco le sirvieron de bastante ayuda a los viejos marineros que construyeron este edificio para sustentar su cubierta, hoy nosotros las recuperamos y les devolvemos la importancia que merecen convirtiendo esta vivienda en el camarote de un barco.
Le pusimos los cabos, como a los mástiles de un velero e incluso trajimos a vivir a una sirena…
Santander, Centro
45m2
2018
Fotografía: David Montero